Teléfono rojo/José Ureña

· Monreal se jugará su futuro en 16 asambleas delegacionales

· El riesgo de retar al estilo Peje y de ser acusado de violencia

· Coahuila tiene la primera ley contra huachicoleros en el país

A la crisis con Ricardo Monreal le quedan muchos capítulos.

Ha retado al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) a reponer el procedimiento y tanto Andrés Manuel López como la dirigencia capitalina y Claudia Sheinbaum lo han ignorado.

Pero fue evidente la ausencia de monrealistas en el mitin dominical en el Monumento a la Revolución, la primer muestra del peso del zacatecano.

A esto se agregarán nuevos actos.

Unos avances:

Monreal esperará tres o cuatro días la respuesta oficial, porque hasta ahora sólo ha habido descalificaciones y ratificación de la candidatura de Sheinbaum.

-Un impasse no comprendido por ignorante de los modos políticos –le digo al perredista Guadalupe Acosta Naranjo.

-Así es la política –me responde.

“Está forzando la expulsión para exhibir la incongruencia de Andrés para luego tener la calidad moral de irse con la frente en alto y decirle a todo mundo: ‘Ya ven, yo no soy el intolerante ni el impositivo’. Ricardo está en lo correcto”.

-Pero, mientras, se apaga la inercia, el enojo, el flujo de simpatizantes a favor de Monreal –le insisto.

-Espérate. Todo en su momento. Ricardo no es un improvisado y al final va a fortalecerse con la verdad.

RECORRIDO POR LAS 16 DELEGACIONES

Más allá de consideraciones, la estrategia.

Si hay respuesta de López -¿antes o después de irse a Londres, Madrid y Nueva York? ¿A través de mensajeros?-, habrá recuperado la estatura moral para huir de Morena.

Y si no, pues con mayor razón.

Entonces vendrá la reacción.

Su plan es recorrer las 16 delegaciones.

Hacer asambleas públicas en cada una de ellas –al estilo Peje, pienso yo- y consultar a la militancia de Morena si se queda o se va.

Y si se va, con quién.

Hasta ahora prima la idea de la candidatura independiente con el respaldo de ese frente opositor conformado por militantes de todos los partidos: panistas, perredistas, priístas, morenistas y por supuesto de otras fuerzas electorales.

Dicho de otra manera, Monreal piensa dar una bofetada a López con su mismo esquema: asambleísmo en plaza pública, votación a mano alzada e invocación de la voluntad popular.

Ese es un ángulo, pero hay otro:

¿Y si los dogmáticos de López reaccionan con virulencia al estilo de la Sheinbaum o de tribus como las comandadas por René Bejarano, Dolores Padierna y Víctor Hugo Lobo?

Habrá sangre y lo acusarán de provocador.

PRIMERA LEY CONTRA HUACHICOLEROS

Nadie se atreve a legislar contra los huachicoleros.

Bueno, casi nadie.

Porque en Coahuila se acaba de aprobar una ley con la cual se sanciona a quien roba y comercializa gasolina y diésel sin el permiso permiso correspondiente.

El objetivo es proteger a la población.

“Es una norma surgida desde la protección civil. Le dimos muchas vueltas y fue el vacío jurídico que encontramos”, me dice el gobernador Rubén Moreira.

Se actúa desde varios frentes.

Se auditan gasolineras y se les exige la factura mediante la cual fueron abastecidos por Petróleos Mexicanos (Pemex) y, si no la presentan, se les decomisa el combustible y se les suspenden actividades.

Reciben un plazo para demostrar la legalidad de sus acciones.

Y si alguien es descubierto cuando comercia, se les detiene de inmediato.

Como la disposición es nueva, viene un informe con pormenores con un dato adicional: ya se desbarataron varias bandas, a quienes se les da trato judicial de delincuencia organizada.