Impulsa Evelyn Salgado acciones para arte y cultura de Guerrero
ZIHUATANEJO, Gro., 19 de julio de 2016.- El director de la oficina de Asuntos indígenas en este municipio, José Pedro Martínez dijo que iniciando las temporadas vacacionales, arriban a este puerto muchas familias que radican en comunidades indígenas, donde confeccionan artículos para vender en estas fechas.
Indicó que entre estas familias, también se encuentran menores de edad que ayudan a sus padres a vender estos productos, para los cuales es una costumbre que desde pequeños los hijos ayuden en los quehaceres, por lo que no consideran que se trate de una explotación laboral, sino de usos y costumbres.
No obstante, manifestó que en la ciudad las cosas son diferentes y el hecho de que en la ciudad los niños salgan a vender se trata quizá de un delito, por lo que señaló que van a recorrer las calles para platicar con los padres y explicar la situación y también buscar la manera de canalizar a estos menores para que reciban ayuda.
Por su parte, la directora del Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Zihuatanejo, Marcela López Salgado dio a conocer que existen programas institucionales para ayudar a estos menores que de alguna manera trabajan ayudando a sus familiares.
“La situación es que a pesar de los operativos que ellos hacen, hay a algunos que no los alcanzan a detectar, por lo que se requiere el apoyo de la población para que denuncien y poder acudir a donde estén estos niños”, afirmó
Aseguró que este problema se da mucho en esta ciudad por ser un puerto donde llega turismo y de alguna manera aprovechan a los hijos para que les ayuden con la venta de sus productos, pero recalcó que esto está estrictamente prohibido y por ningún motivo se debe permitir.
Aclaró que cuando se detecta un problema de esta naturaleza, se llama a los padres al DIF, se habla con ellos, se les explica que no se debe ni está permitido que los menores trabajen e inmediatamente se les agrega a un programa de ayuda.
“Este problema se da mucho en los periodos vacacionales y se convierte en un problema difícil para este organismo y sobre todo porque a pesar de que se habla con estas personas, reinciden en la acción”, reiteró.
Explicó que lo delicado es cuando los niños abandonan la escuela por trabajar, aunque la mayoría lo hace en periodos de vacaciones y destacó que actualmente, están llevando un programa para ayudar a 20 de estos niños con la finalidad de que dejen de vender y continúen con su educación escolar.