
Descomplicado
Una triste realidad
No hace mucho, platicando en una mesa de café con un funcionario municipal sobre el poco apoyo económico que el ayuntamiento otorga a las actividades culturales, escuché del interlocutor unas frases que son una muestra de la superficialidad de la actividad política en el Municipio de Acapulco.
-La cultura no da votos en las elecciones. Regalar pacas de cartón, tinacos y pipas de agua potable, sí.
Lo dejé hablar, y entre otras cosas, dijo.
-Dentro de unos meses habrá elecciones, y en el ayuntamiento queremos que nuestro partido continué gobernando.
Sin más, me despedí de él amablemente, intentando disimular mi contrariedad.
Comprendí por qué los grupos teatrales y los jóvenes poetas tienen que presentar su trabajo experimental en la céntrica cantina “El bar del puerto” y a qué se debe el deplorable abandono del pequeño teatro municipal “Domingo Soler”.
Se me vino a la memoria los más de veinte años transcurridos desde el último libro impreso por la ya fenecida Comisión Editorial Municipal, realidad que lleva a una mezcla de melancolía e indignación.
Cierto es que el Instituto Nacional de Antropología e Historia ofrece a los acapulqueños y visitantes el espléndido museo del Fuerte de San Diego, espacio cultural que nos orgullece.
Pero también que el teatro Juan Ruiz de Alarcón, otrora el más moderno y funcional de México, como el resto del Centro de Convenciones construido por el gobierno de Luis Echeverría en 1974, sin mantenimiento alguno, ya no son funcionales y carecen de lo más elemental para su funcionamiento.
Es una verdad también, que una empresa privada construyó y opera el esplendoroso Fórum Mundo Imperial, reconocido como uno de los mejores centros de espectáculos del país, pero también que la cruel, áspera y despiadada mercadotecnia obliga a sus propietarios a presentar espectáculos populares, no precisamente culturales, desaprovechando las instalaciones suficientemente adecuadas y apropiadas para ofrecer funciones de ópera, valet, música sinfónica y teatro clásico.
Si la cultura no da votos a los gobiernos municipales, tampoco dinero en abundancia a los propietarios del Fórum.
Triste realidad.
El actual Ayuntamiento, próximo a concluir su gestión, inició en el antiguo Palacio Municipal en el centro de la ciudad, un Museo de la Ciudad, que parece ser, quedará inconcluso por falta de recursos económicos, por lo tanto, es de esperarse que la administración municipal que entrará en funciones el próximo 1 de octubre y que preside la abogada Adela Román Ocampo, continué el proyecto, y si es posible lo amplíe.
También sería un gran logro que la alcaldesa Román dote a la Dirección de Cultura Municipal, que estará a cargo de la actriz y directora de teatro experimental, Malena Steiner, de un presupuesto suficiente para el fomento de la cultura.
Sería un capítulo municipal importante en la Cuarta Transformación enunciada por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador,