El presupuesto es un laberinto
Los impresionantes efectos de la música en el cerebro
Son pocas las actividades desarrolladas por los seres humanos, de cualquier época, ubicación geográfica, edad, cultura, situación económica, religión, etcétera, en las que se coincide de manera universal, como lo es el hecho de que la música nos produce gran placer.
La música ha sido parte de la humanidad desde sus inicios: investigaciones arqueológicas han encontrado objetos musicales: como un raspador, hueso con muescas paralelas, que al frotarlas con otro utensilio produce sonidos rítmicos, fabricado hace 40 mil años en el norte de Bélgica, así como pinturas rupestres del periodo neolítico mostrando hombres y mujeres danzando.
En tiempos modernos, la presencia musical en toda la sociedad es de tal magnitud que es prácticamente imposible dejar de escuchar en cualquier lado algún tipo de música, ya sea por radio, por TV, en la calle o en la casa; en la oficina; la escuela; donde sea o a través de algún pequeñísimo dispositivo moderno capaz de almacenar cientos o miles de horas de música.
Entonces, si reconocemos la importancia de la música para cualquier ser humano de cualquier época o condición, también nos preguntamos: ¿Por qué, que es lo que hace que la música haya sido vital para la humanidad desde sus inicios?
Diversos estudios neurofisiológicos han encontrado que la música afecta radicalmente la química del cerebro. Cuando la melodía nos resulta agradable, el cerebro libera dopamina, una neurohormona segregada por el hipotálamo y que se le relaciona con el placer.
Otros trabajos médicos han encontrado también que la música mejora la actividad motora de personas con enfermedad de Parkinson y se ha registrado el incremento del razonamiento espacial en personas autistas e incluso en la actualidad se utiliza como apoyo en terapias de pacientes que sufren convulsiones.
Cuando se escucha música, el cerebro se activa en distintas áreas; hablábamos de la dopamina, relacionada con el placer, pero también con procesos de aprendizaje, comportamiento, actividad motora, el sueño, el humor, la atención y más y de esta forma, al segregarse, se activan varias áreas cerebrales. Otro estudio de la Universidad de Florida asevera que no existe otra actividad realizada por las personas, que active tantas porciones cerebrales al unísono, como la música.
Por otra parte, se ha demostrado que niños que tenían una educación musical de 3 años o más, presentaban un incremento en su motricidad fina, así como en la discriminación auditiva indispensable para el estudio de idiomas distintos a la lengua materna, mejoraron su vocabulario, presentaron mejores habilidades en su lenguaje no verbal y su entendimiento de la información visual, distinguiendo con mayor facilidad las similitudes, las diferencias de formas y los patrones.
Asimismo, es un hecho que el área de la salud se vale de la música con el fin de mejorar, mantener o intentar recuperar el funcionamiento cognitivo, físico, emocional y social y ayudar a lentificar el avance de distintas condiciones médicas. La musicoterapia, a través de la utilización clínica de la música, busca activar procesos fisiológicos y emocionales que permiten estimular funciones disminuidas o deterioradas y realzar tratamientos convencionales. Se han observado importantes resultados en pacientes con trastornos del movimiento, dificultad en el habla producto de un accidente cerebrovascular, demencias, trastornos neurológicos y en niños con capacidades especiales, entre otros.
Podríamos extendernos mucho más enumerando los beneficios personales que nos aporta la música, pero no es necesario, a todos nos gusta, todos la disfrutamos y muchos conocemos sus beneficios, orgánicos y sociales, pero hablando de esto último, tal vez sería momento ideal para que los encargados de dirigir el país, considerasen a la música, más específicamente a las escuelas de música, como un instrumento perfectamente viable para rehacer el tejido social y/o fomentar la convivencia pacífica y culta de la sociedad; así como en su momento lo hicieron de manera intensa y sostenida todos los países del bloque comunista durante la Guerra Fría; creo que ofrecería grandes beneficios.
TIRO CON ARCO
La “cuarentena” sugerida por las autoridades sanitarias de todo México, afectó gravemente las expectativas de los arqueros guerrerenses que desde hace meses se encontraban inmersos en una intensa preparación con miras a participar en diversas justas deportivas de la especialidad, como por ejemplo, La Universiada, que se realizaría por estas fechas en Oaxtepec, Morelos.
Todo el trabajo realizado durante meses, se vino abajo con esta contundente medida sanitaria, lo cual, sin duda, resultó sumamente pesaroso y decepcionante para los tiradores de flechas.
Afortunadamente y aún a sabiendas de que todos estos meses de arduo trabajo se perderán totalmente por la inactividad deportiva, los flechadores guerrerenses apoyamos de manera contundente la drástica disposición de suspender toda actividad grupal, mínimo hasta el próximo 20 de abril, conscientes de que es la mejor forma de combatir la pandemia causada por el Covid 19 en nuestro país.