Hoja verde
Playas y albercas anti coronavirus
Se reabrieron las playas de Guerrero debido a que la economía local ya no podía seguir inactiva y aunque las cifras de contagios por Covid 19 se encuentran en el punto más elevado, pues fue necesario reactivar la actividad turística, motor principal de la economía estatal.
Acapulco es el principal desarrollo turístico de la entidad y sin duda, casi todos disfrutamos de sus playas, aunque algunos prefieren nadar en las albercas, de las cuales hay muchas y muy hermosas en cientos de hoteles existentes aquí.
¿Sin embargo, el extasiado lector habrá pensado en la posibilidad de contagiarse de Covid-19 cuando se mete al agua?
Al respecto, la British Broadcasting Corporation (BBC) caracterizada por la seriedad de todas sus producciones, incluyendo a las periodísticas, se dio a la tarea de investigar la posibilidad de un contagio, tanto en el mar, como en las albercas.
Presento aquí, de forma resumida y en mis palabras, una síntesis del trabajo referido, al considerar que puede contribuir a despejar las dudas, tanto de nuestros apreciados visitantes, como de los profesionales de la industria turística local.
Iniciemos considerando el hecho de que el virus SRAS-CoV-2, causante de la Covid 19, es nuevo y no se ha investigado su supervivencia en entornos acuáticos, pero es un hecho que tiene características comunes a otros virus, los llamados coronavirus, que si han sido investigados a fondo y es por ello que la Organización Mundial de la Salud (OMS) basa sus recomendaciones sobre el tema en las evidencias científicas recogidas para otros coronavirus: “La morfología y la estructura química de este virus es similar a las de otros coronavirus para los cuales si existen datos de supervivencia”, dice su informe.
Hablando del mar y playas, afortunadamente las investigaciones resultan absolutamente positivas para bañistas y turisteros, porque “El agua de mar tiene sal y se ha comprobado experimentalmente que este elemento desactiva o destruye los coronavirus” y muchos otros micro organismos que no pueden vivir en un entorno salino. El agua de mar tiene una osmosis, una densidad de iones, que mata muchas de las familias de virus, agrega la información.
Por otra parte, hablando de albercas, la protección ante el coronavirus es más evidente porque el cloro que se usa como desinfectante facilita la muerte del coronavirus que causa la Covid 19 y su uso es obligatorio en muchos países por normativa sanitaria desde hace años. El porcentaje de cloro que debería tener una piscina es de al menos de 0.5 miligramos por litro, aunque normalmente suelen tener entre uno y dos miligramos por litro, un nivel que, según las autoridades del sector, sigue siendo seguro para la salud. De hecho, se determinó que el virus de la influenza moría solo cinco minutos después de estar en contacto con agua potable con un cloro residual de 0,3 miligramos por litro. Finalmente concluye: “Una contaminación dentro del agua es improbable, pero es mucho más improbable en agua salada o en agua de piscina”. “No hace falta más cloro, pero hay que asegurarse de que la alberca siempre tenga el nivel adecuado de cloro o bromo, independientemente del número de personas que esté nadando.
Existe otro factor positivo a considerar, apunta el trabajo y éste es el “Efecto Dilución”, que es el hecho de que el virus se disemina en el agua y esto disminuye su poder de infección, porque una persona debe estar expuesta a un número mínimo de partículas virales para enfermar. Así pues, cualquier secreción de moco o saliva, por estornudo, tos o lo que sea, con carga viral se diluirá rápidamente al caer en el agua. A este efecto dilución, se suma la acción de la sal o el cloro del mar y las albercas.
Sin embargo, hay un factor que no considera el estudio y que definitivamente es el más peligroso y desde luego puede producir fácilmente el contagio de los bañistas, sea en las albercas o las playas: la falta de precaución de las personas que ignoran las medidas de seguridad cotidianas: sana distancia, uso de tapabocas y lavado de manos.
En conclusión: si una persona esta contagiada y se le acerca y usted respira los virus que emite, se va a contagiar y probablemente enfermará, aunque este usted en el mar, la arena, la alberca o la Luna, donde esté usted se va a contagiar, así que, si desea tener una vacación segura, con bellos recuerdos y sin contratiempos o tragedias biológicas, pues simplemente protéjase y proteja a los suyos, no está tan difícil. ¿No lo cree usted, sano lector?
AUSENCIA DE ARQUERIA EN LA UDA
La semana pasada se reabrieron a un 30 por ciento de su capacidad las instalaciones de la Unidad Deportiva Acapulco, UDA, para ciertos deportes que se desarrollan en exteriores y puedan ser practicados siguiendo las medidas de precaución biológica.
Entre los deportes que pueden reanudar actividades se encuentra el Tiro con Arco y el entrenador titular de esa especialidad en la UDA, LAE. Villy Deloya Parra, consultó en grupo privado vía internet sobre el regreso, a lo que la mayoría de los padres de deportistas, particularmente los más pequeños, se negaron por temor al Covid-19 y pidieron postergarlo hasta agosto, lo cual es sensato, sin duda alguna. Sin embargo, hay otro grupo de arqueros, los más comprometidos con el deporte de las saetas, aquellos que entrenan fuerte y lo han hecho por largo tiempo y que han invertido importantes recursos económicos en su equipo y material, buscando lograr una posición nacional, pues desean reanudar sus entrenamientos ya.
El “profe Villy”, por su parte, asumió rápidamente la posición de los padres y no parece haber contemplado las intenciones de los otros arqueros, los avanzados y dijo que hasta agosto, aunque en privado me confesó que no había dinero para pagar la renta para el reinicio. Comenté esto con los flechadores que, como un servidor, ansiamos regresar a entrenar y se dejó entrever la posibilidad de hacer alguna cooperación extraordinaria para que se rente el campo de béisbol que se habilita como campo de tiro y continuar entrenando.
Para saber sobre ésta posibilidad, consulté de manera extraoficial y solo a nivel de “cuates” con el director de la UDA, Oscar Memije Franco, quien me comentó que esto debía ser tratado oficialmente por el Profe Villy en su calidad de entrenador, aunque generosamente y a nivel personal, también me informó que oportunamente se solicitó a todos los entrenadores de la UDA que antes del regreso deberían tomar un curso sobre prevención biológica, vía internet, que impartió la Escuela de Medicina de la Uagro y presentasen el certificado del caso, además de un plan para el regreso a las prácticas, para analizarlo en conjunto y determinar horarios y lo demás conducente. Lo malo es que, hasta el momento, el profe Villy, ni siquiera se ha comunicado con el funcionario de la UDA y mucho menos presentado los requisitos enumerados y por ende, no se puede prever o planear nada, absolutamente nada sobre el Tiro con Arco.
A pregunta expresa, de si los arqueros podríamos perder el campo, el funcionario de la UDA me señaló verbalmente que tal cosa no va a suceder, pero, en este mundo, bien sabemos todos: “Con dinero, baila m’hija con el señor”.
Personalmente considero que es momento que el profe Villy, también presidente de la Asociación de Tiro con Arco de Guerrero, ATAG, se sacuda el letargo post pandemia y se avoque a solucionar los menesteres del deporte que dirige, pues sería lamentable que por su abandono, se perdiera el espacio de la UDA, que tradicionalmente han sido disputados al Tiro con Arco por otros grupos de deportistas que pueden pagar más por éste y están dispuesto a hacerlo.