Sin mucho ruido
Sindicato de Salud: disputan filón de oro
Al más viejo y rancio estilo del sindicalismo corporativo, desde Ciudad de México, se intenta imponer -a como dé lugar, otra vez-, como dirigente de la Sección 36 del Sindicato de Salud, a Beatriz Vélez Núñez, quien lleva en el cargo 14 años; violando estatutos, va por un nuevo periodo de cuatro años.
Mostrando el músculo, Vélez Núñez encabezó ayer mitin y marcha de unas tres mil personas -entre acarreados de colonias y trabajadores de salud-, quienes desquiciaron la capital del estado provocando caos vial en varias arterias, luego de amañado registro.
A su oponente, Hilario Zúñiga Escamilla, una cínica y siniestra comisión -charril- enviada desde el CEN del SNTSS, le negaban el pre registro, mediante argucias legaloides.
Hasta la noche de ayer, se desconocía si Hilario había logrado su registro como candidato para la contienda electoral del próximo 5 de septiembre. ¿Será válida esa elección, si Vélez Núñez, es única como candidata?
La Sección 36 del SNTE, es uno de los últimos reductos del priismo corporativo en Guerrero, y cuenta con el respaldo del líder nacional del SNTSS, el magnate y multimillonario Joel Ayala Almeida, quien a toda costa intenta imponer en ese liderazgo sindical a su compinche, Beatriz Vélez Núñez.
Betty, bien que ha aprovechado esa posición sindical para catapultarse a cargos de elección, como ex diputada federal; fue una de las legisladoras que aprobaron el “gasolinazo” de la era sexenal del ex presidente Enrique Peña Nieto. Recibió bono millonario por su voto, al igual que otros legisladores federales.
Cuando se abrió el pre registro y luego el registro, se vio claramente que la comisión encabezada por el enviado del CEN del SNTSS, Guillermo Rodríguez, trajo consigna para impedirle la acreditación al candidato, Zúñiga Escamilla, quien encabeza la planilla color Rojo. Vélez Núñez, lidera la de color oro.
Hasta cerraron el pórtico y colocaron porros violentos, para bloquear el paso a Hilario; hubo connatos de violencia, pero finalmente el aspirante accedió hasta la mesa registradora donde estaban los comisionados mapaches y cochuperos enviados por el capo sindical, Ayala Almeida.
La todavía dirigente del Sindicato de Salud, Vélez Núñez, acusó -sin fundamento alguno- a la Secretaria de Salud, Aidé Ibarez Castro de “operar a favor del Hilario Zúñiga”. Dijo contar con una grabación, que nunca mostró a los periodistas a quienes despóticamente les negó entrevistas.
Para la elección del nuevo dirigente de la Sección 36 del SNTSS, se instalarán unas 76 casillas en los centros de trabajo; votarán alrededor de 15 mil trabajadores basificados.
Partidarios de Zúñiga Escamilla, temen que la vitalicia y vetusta Vélez Núñez, ponga en práctica todas las marrullerías del viejo priismo -que aprendieron muy bien los del partido Morena-, para ganar la elección de manera sucia y antidemocrática; rellenando urnas, comprando el voto, acarreando y cooptando gente mediante la “operación tamal”.
Se frota las manos Betty Vélez, para continuar ordeñando la gorda vaca lechera -cuatro años más-, las millonarias cuotas sindicales de más de 17 mil empleados de la Secretaría de Salud en Guerrero, como lo ha venido haciendo a lo largo de 14 (años). Va que vuela para igualarle la marca, a la también arcaica y multimillonaria, Elba Esther Gordillo.
Vélez Núñez, se ha convertido en una de las mujeres políticas más potentadas de la entidad, dueña de clínicas médicas y de hemodiálisis; además de otros negocios logrados a la sombra del poder político y sindical… Punto.