TEXAS, EU., 6 de marzo de 2015.- En nuestro mundo contamos siempre con asombrosos casos de superación, sin embargo, jamás habrá historia más grande de amor propio que aquella protagonizada por la señorita Mayra Rosales, una joven que hizo lo imposible y este jueves alcanzó la meta y por finalmente pudo despedirse de los 418 kilogramos que le impedían llevar una vida feliz.
En ese sentido y, según recoge el Daily Mail, Mayra fue a una mujer despechada a quien su gusto por la comida mexicana, una vida sedentaria y un problema de la tiroides, la convirtieron en un ser viviente esclavizado a una cama King Size, hasta donde su familia le llevaba alimento y le proporcionaba la asistencia para asearse, ir al baño y lo más importante: darse la vuelta.
Asimismo, la también considerada en su momento la mujer más pesada del mundo, alcanzó notoriedad pública en 2008, ello haber sido partícipe en uno de los infanticidios más cruentos en la historia de Estados Unidos.
LO APLASTA MEDIA TONELADA
Fue el 18 de marzo cuando un pequeño de 2 años de edad, llamado Eliseo Rosales Jr., fue trasladado de emergencia al Hospital General de La Joya por causa de problemas respiratorios y un traumatismo craneal severo, padecimientos que ultimadamente le produjeron la muerte unas horas más tarde.
En medio de la expectación pública y sin pistas por descubrir, su tía, Mayra Lizbeth Rosales, se entregó voluntariamente a las autoridades bajo sospecha de asesinato, alegando que “se había caído y accidentalmente aplastó al menor con su mano derecha”.
Sin ninguna esperanza, Mayra enfrentó desde entonces un juicio por homicidio en primer grado, ganándose el mote de ‘La Asesina de Media Tonelada’, ello sin mencionar que “la justicia intentó proceder contra ella, pero al no encontrar la manera de movilizarla y tampoco una celda con las dimensiones requeridas, decidió mantenerla bajo arresto domiciliario”.
EXONERADA POR PESO
Por fortuna, las autoridades ministeriales determinaron que la muchacha, que en ese entonces pesaba 450 kilos, no podría haber perpetrado el ilícito “al no contar siquiera con el rango de movilidad necesario para voltearse a mirar al bebé. Las lesiones sólo pudieron haber sido causadas por un ataque directo y deliberado en la cabeza”, precisó la defensa de Mayra durante las primeras comparecencias públicas y, ultimadamente, la verdad salió a la luz cuando ‘La Asesina de Media Tonelada’ reconoció haber mentido a la policía.
Trascendió que Jamie, hermana de Mayra y madre del pequeño Eliseo, tenía una cierta predilección por abusar físicamente del menor y, la mañana del 8 de marzo de 2008, habría golpeado con un cepillo de pelo al niño de 2 años, esto luego de que se negara a comer y cayó inconciente. Fue entonces que su adorada tía Mayra tomó la decisión se servir como “chivo expiatorio”.
Ultimadamente, y tras un litigio de 3 años, Jamie fue condenada a vivir tras las rejas hasta el próximo 2025 y Mayra se supo esclavizada de por vida a su dormitorio, imposibilitada para moverse o siquiera rendir un homenaje a su sobrino. “Sabía que, si quería levantar a los restantes hijos de su hermana, que quedaron bajo su cargo, tendría que salir de la cama y bajar de peso”, publica The Examiner.
Fue entonces en 2011 que, con 495 kilos de peso, la texana pidió que destruyeran algunas paredes de su casa para trasladarla al centro médico más cercano, y aunque se requirió de 10 hombres para moverla de su cama (donde la muchacha habría permanecido confinada los últimos 6 años de su vida), no había vuelta atrás en el camino para recuperarse a si misma.
CAMINO A LA ACEPTACIÓN
Mayra tuvo que trabajar, de adentro hacia afuera, para perder peso. No sólo tuvo que cambiar su visión de la vida, necesitaba ayuda médica, por ello es que desde 2001 ha sido objeto de 11 cirugías, incluyendo una cirugía de banda gástrica y procedimientos adicionales de eliminación de la piel.
“Me estaba muriendo. No se si hayan visto fotos de mi en aquel entonces pero era prácticamente imposible verme el rostro. Había renunciado a la posibilidad de vivir. Existía en este plano, pero no vivía una vida, valga el pleonasmo. Si bien es cierto que la comida se necesita para sobrevivir, yo sobrevivía para comer en aquel entonces”, advierte Mayra en entrevista con Inquistr News.
Hoy en día, Mayra se ha dado una segunda oportunidad en la vida, y uno de sus objetivos es tener un buen estado físico para poder adoptar y cuidar a sus sobrinos. Tiene pareja, da conferencias por todo Estados Unidos “inspirando a aquellas personas obesas que creen que no pueden cambiar su vida” y cuenta con una página en Facebook (https://www.facebook.com/texasvalleygirl2) con más de 28 mil seguidores, a quienes emplaza a “hacer brillar su vida” perdiendo peso no sólo físicamente, “sino en espíritu”.
“No pierdan la esperanza y continúen peleando. Sólo tenemos una vida y vale la pena luchar por ella… por nosotros mismos”, advierte la considerada en su momento ‘Mujer más Pesada del Mundo’, quien perdió el 80% de su masa corporal en espacio de 3 años.