Suspenden servicios religiosos en Atliaca

CHILPANCINGO, Gro., 14 de enero de 2014.- La Diócesis de Chilpancingo suspendió los servicios religiosos en la iglesia de Atliaca, para evitar conatos de violencia entre la población y salvaguardar la integridad del cura Carlos Cristino Luna.

El subsecretario de gobierno para Asuntos Religiosos, Jorge Alberto González Rivero informó que el obispo Alejo Zavala Castro y los vicarios de la diócesis suspendieron los servicios en la iglesia católica de Atliaca, para evitar más agresiones entre la población y cuidar la seguridad del sacerdote.

La jornada del domingo 29 de diciembre ocurrió un enfrentamiento a golpes en la explanada de la iglesia de Atliaca, que dejó como saldo 7 feligreses heridos.

El conflicto en católicos inició hace cuatro meses, cuando un grupo de pobladores acusó al cura Carlos Cristino Flores de alterar los usos y costumbres de la población indígena y fomentar el consumo de alcohol entre los feligreses.

El grupo de aproximadamente 50 inconformes tomó las instalaciones de la iglesia e impidió, desde entonces, la celebración de los servicios religiosos.

Este martes el cura se reunió con el subsecretario de gobierno para Asuntos Religiosos, Jorge Alberto González Rivero.

Entrevistado a la salida del encuentro, el sacerdote negó las acusaciones y confirmó la suspensión de los servicios religiosos en la iglesia de Atliaca.

Recordó que llegó a la parroquia de Apango el 7 de octubre del 2011 y desde entonces atendió los 12 pueblos que la conforman.

“El conflicto comenzó el 17 de septiembre del 2013, me pidieron que sacara a la secretaria y al sacristán… Los quité, pero después ellos me siguieron quitando muchas cosas como son las del Santísimo, me quitaron muchas cosas y al último me pide que yo me vaya, pero no hay razones, no me dan razones”, relató el cura Carlos Cristino Luna.

También negó que fomentara el consumo de alcohol entre los feligreses y vulnerara las tradiciones de la comunidad indígena.

“Esos son inventos, ni siquiera me he metido con eso, no se cual es la finalidad del ataque contra mí, no lo entiendo, hasta la vez no entiendo qué quieren, porque se les ha dado todo, se les ha atendido todo, el obispo también ha accedido a todo, no entiendo cual es la finalidad, qué persiguen”, lamentó.

Indicó que ofrecerá servicios religiosos en el resto de las comunidades que integran la parroquia, excepto Atliaca.

“No iré a celebrar hasta que no se arregle este asunto y que lo arregle el apoderado legal de la diócesis, el problema podría llegar al Ministerio Público para que se aclare, hemos trabajado para lograr la paz y ellos han violado los acuerdos”, dijo en referencia al grupo de opositores que mantienen tomadas las instalaciones de la iglesia.

Subrayó que los opositores no son feligreses católicos y aún así tomaron la iglesia y violentaron el derecho de los creyentes a recibir misa.

También lamentó que el conflicto llegó a tal grado que surgieron conatos de violencia entre la población.

“Los católicos han aguantado todas esas cosas pero ya los han agredido muchas veces, tengo los videos donde se ve como han agredido mucho a los católicos que van a la misa… De tantas agresiones en un momento se puede responder, se aguantan muchas cosas pero ya no se aguanta tanto, llega un punto en que las personas revientan”, remarcó.

Por su parte el subsecretario de Asuntos Religiosos reconoció que el conflicto de Atliaca es el de mayor complejidad en todo el estado.

Sin embargo, dijo, el gobierno se mantendrá al margen y respetará la autonomía de la iglesia para la solución del conflicto.

La única labor que realizarán, dijo, es la de mediadores entre la Iglesia y el pueblo para evitar conatos de violencia.

Hasta la tarde del martes la iglesia de Atliaca continuaba tomada por los opositores al cura.

“El obispo tomó la determinación con sus vicarios de la iglesia que el padre ya nos diera más misas ahí, ya se les cumplió lo que ellos solicitaban pero siguen estando en la iglesia. Nosotros seguimos dialogando, seguimos haciéndoles ver que están cometiendo un delito federal”, dijo el funcionario.