Descartan víctimas guerrerenses por incendios en Los Ángeles
CHILPANCINGO, Gro., 04 de marzo de 2014.- Un grupo de 76 trabajadores de la Coordinación General de Fortalecimiento Municipal (Fortamun) tomaron las oficinas de esta dependencia y denunciaron abusos, hostigamiento y violación a sus derechos laborales.
Desde las 11:00 horas, los trabajadores de base, extraordinarios y de confianza cerraron con un candado el acceso principal a las oficinas del Fortamun y colocaron varios carteles.
Los trabajadores exigieron la destitución del coordinador general del Fortamun, Carlos Sánchez Barrios; del delegado administrativo, Francisco Tapia Leyva y del director general del Instituto de Capacitación y Desarrollo Municipal, Juan Martínez Alvarado.
Entre las violaciones y abusos a sus derechos laborales, los manifestantes indicaron la colocación de un reloj checador que les marca una jornada de trabajo de nueve horas, sin que la hora extra se refleje en su salario.
Otro reclamo fue que Tapia Leyva amenazó con levantarles actas administrativas por llevar a sus hijos al trabajo, ya que estos dan “mal aspecto” a la oficina.
“Muchas mamás o papás no pueden dejar a sus hijos en casa porque no tienen quien se los cuide, por eso los traemos”, explicó una madre de familia.
También reprocharon que no se les respeten derechos laborales como vacaciones o permisos por enfermedad.
Incluso comentaron que los abusos del delegado administrativo del Fortamun han llegado al punto del hostigamiento contra varias mujeres que trabajan en la dependencia.
“Hay compañeras a las que Francisco Tapia Leyva las ha hecho llorar y ella no dicen por qué, no sé si por miedo, pero en varias ocasiones he visto a varias compañeras llorando”, expresó una de las manifestantes.
Los trabajadores paristas enviaron un mensaje al gobernador: “Que nos dé solución o seguiremos con el plantón”.
Sentenciaron que no admitirán la instalación de una mesa de diálogo, ya que la única forma de solucionar el conflicto es con la destitución de Carlos Sánchez Barrios, Francisco Tapia Leyva y Juan Martínez Alvarado.