En el juego
El efecto del escándalo político de “La Casa Blanca de Las Lomas” –el peor del año– devasta la imagen de Grupo Higa. El consorcio del constructor Juan Armando Hinojosa Cantú no se volverá a subir al ferrocarril del progreso… y menos con boleto pagado por el gobierno. El principal socio mexicano de China Railway Construction Corporation fue bajado a “tamborazos”; queda descartado para la nueva licitación del Tren de Alta Velocidad México-Querétaro –prevista para enero entrante–; también quedará fuera de nuevas licitaciones para obras públicas de infraestructura.
El Secretario de Comunicaciones acota sospechosismos.
Juan Armando Hinojosa Cantú, cabeza del consorcio constructor, financió a la esposa del Presidente de la República la compra de la casa de Las Lomas, la del secretario de Hacienda, en Malinalco, y algunos otros bienes raíces de varios cercanos al restringido círculo mexiquense en el poder… también remodela el Hangar Presidencial.
Los encuentros cercanos de Hinojosa Cantú lo han ayudado a amasar parte de su fortuna, pero hoy surten el efecto contrario; su nombre resulta impresentable ante la opinión pública, publicada y política… Hinojosa, apesta.
La constructora Higa no está legalmente inhabilitada –ninguna restricción puede excluirla del concurso público– pero en las leyes no escritas resulta una empresa maldita. El contratista ex consentido del peñanietismo quedó marcado por la letra escarlata del conflicto de interés y la sombra de la corrupción…
EL MONJE LOCO: Annus horribilis este 2014; nos deja mucho para reflexionar y poco para celebrar. Este “monje” se recluye. Saldrá del claustro vacacional el 5 de enero.