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ZIHUATANEJO, Gro., 17 de enero de 2020.- Autoridades de la secundaria Eva Sámano de López Mateos y el alumno Abdul Auriel Hernández Martínez, acompañado de su mamá María Dolores Abarca, aclararon que se trató de un accidente fortuito y no una agresión directa el que fuera apedreado en la institución.
El estudiante de primer grado acudió ante el director del plantel, Domingo Arellano Abonza, para relatar cómo ocurrieron los hechos el jueves después del receso, junto a la cancha de basquetbol, en el interior de la escuela.
Según la versión del menor, estaban otros estudiantes lanzando piedras en la cancha y una le cayó en la cabeza golpeándolo, cuando se encontraba en compañía de otro alumno, pero solamente él sufrió el golpe, lo cual le causó un hematoma.
Mencionó que le comentó al profesor de deportes, pero éste solamente le indicó que se pusiera una bolsa de agua en el lugar del golpe, y posteriormente acudió al prefecto y le dijo que se pusiera hielo.
A la dirección también acudió la mamá del agraviado, la cual indicó que su hijo debió haber sido atendido de manera adecuada para ver qué fue lo que pasó, además que debieron llamarle la atención al niño que arrojó la piedra.
“Yo vi mal que no lo auxiliaron y no me avisaron para informarme de lo que había ocurrido, pues me dijo que llegó al salón y se durmió un buen rato, y eso no es normal”, expresó la tutora.
Por su parte, Domingo Arellano destacó que en la dirección se atienden las prioridades y una de éstas son los alumnos, por lo cual dijo que se les debió haber avisado para atenderlo, en tanto el prefecto indicó que se mandó citatorio a los padres del alumno que lanzó la piedra para que haga lo conducente.