Caminos del sur/Manuel Nava

Movilizaciones y bloqueos

Desde hace algunos años, se ha venido generando la multiplicación de poderosos movimientos populares de protesta en todo el mundo, algunos muy efímeros y otros siguen activos.

Sin lugar a dudas se inició con el proceso revolucionario tunecino, punto de partida de una verdadera onda de conmoción política que alcanzaría a muchos países del mundo árabe a partir de 2011, mientras otros movimientos sociopolíticos de protesta se extendían por Europa y América.

Los movimientos actuales exigen en todas partes el fortalecimiento de los derechos sociales y democráticos, al tiempo que revelan las vulnerabilidades estructurales, sociales, económicas y políticas de los países en los que se despliegan.

La denuncia y el rechazo de varios fenómenos recurrentes, algunos de los cuales se han agravado desde el comienzo de la década, constituyen el núcleo de estas movilizaciones que dejan ver cierto grado de articulación: alto costo de vida y disminución del poder adquisitivo, desigualdades sociales, políticas de austeridad que vuelven oneroso el acceso a servicios públicos básicos deteriorados, corrupción endémica, acaparamiento de las instituciones por parte de un cuerpo político al servicio de minorías privilegiadas, lógicas confesionales (Oriente Medio) y clientelistas para la distribución del poder y las riquezas que refuerzan las dinámicas de desposesión.

México no ha estado exento de ello. Curiosamente ha sido en este periodo de gobierno de Morena, un partido que habla de un proyecto de Nación diferente al modelo que se ha venido construyendo desde hace 36 años en el país, que algunos de esos movimientos han logrado ganar la calle y cuestionan a la actual autoridad.

Algunos de estos movimientos sociales se han concentrado más en el ejercicio de la violencia que en la propuesta de la reivindicación de la causa que dicen enarbolar y su activismo se reduce a formas de protesta.

La protesta social, es un medio para manifestar y expresar opiniones e ideas, pero también para evidenciar públicamente las problemáticas que afectan distintos ámbitos, tanto de manera individual como colectiva, pero a diferencia de los movimientos sociales, ésta, es efímera.

Una manifestación, protesta o marcha es la exhibición pública de la opinión de un grupo activista (económica, política o social), mediante una congregación en las calles, a menudo en un lugar o una fecha simbólicos y asociados con esa opinión.

El fenómeno actual es la realización de obstrucciones a las vías de comunicación, como un mecanismo de protesta y no está siendo el último recurso sino el primero. En muchos de los casos se demanda atención delas autoridades cuando no se han usado los canales para demandar esa atención o una audiencia. Primero se bloquea y luego se hace la demanda.

En un principio las agrupaciones que organizaban estos bloqueos eran de carácter gremial o político. Concretamente la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) o algún partido político. En la actualidad hasta la falta de algún servicio público se convierte en causa para efectuar un bloqueo los cuales generan consecuencias negativas no solo en términos económicos.

En la Región Pacífico Sur esta forma de protesta se ha multiplicado. En Chiapas durante marzo y abril Miembros del movimiento magisterial y popular de Chiapas de la Sección VII del SNTE-CNTE, realizaron movilizaciones y bloqueos porque el gobierno no ha querido echar atrás el decreto que mantiene congelado los fondos de la Caja de Ahorro y el Fondo de Ahorro y Beneficio Social (FABES), por lo que aproximadamente 33 mil maestros no pueden ser beneficiados con los más de 2 mil 300 millones de pesos que hay de fondo en este rubro.

Otra de las demandas es la abrogación de la nueva ley del USICAMM, a la consideran la misma reforma educativa que implementó el gobierno de Enrique Peña Nieto, ya que contiene más del 80 por ciento de la reforma original.

En Guerrero las movilizaciones y bloqueos de los que abanderan la causa de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, cotidianamente bloquean la autopista del sol, o el tramo urbano de la misma a la altura del Parador de marqués en Chilpancingo. Esas acciones han sido secundadas por colonos y padres de familia con demandas propias. Otro tanto ocurre en Acapulco.

En Michoacán maestros de la Sección XVIII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE),  el grupo Poder de Base, la Organización de Normales del Estado de Michoacán (ONOEM), entre otros han llegado a bloquear hasta las vías del tren obstaculizando el flujo de mercancías por semanas.

Se han registrado diversos bloqueos y protestas en el estado de Oaxaca por parte de estudiantes e integrantes de instituciones normales de la entidad que tenían el objetivo de hacer una exigencia al gobierno estatal para la contratación de egresados.

Normalistas egresados, supervisores y jefes de sector de educación primaria de la Sección 22, el Sindicato de Trabajadores y Empleados de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (Steuabjo) y la organización «Sol Rojo», realizaron bloqueos y protestas en la capital oaxaqueña.

El que ama la destrucción, ama lo ruin, diría la abuela.