Lo condenan por privación de libertad de exdiputado en Chilpancingo
ACAPULCO, Gro., 20 de septiembre de 201.- La enfermera a la que un hombre le destrozó la mano a pedradas el pasado sábado en el hospital general del ISSSTE, no regresará a trabajar a causa de las lesiones que sufrió, indicó la delegada sindical del instituto, Guadalupe Palacios Gutiérrez.
De acuerdo con lo publicado por el diario El Sur, Palacios Gutiérrez aclaró que el día de la agresión, el atacante “entró solo”, versión que coincide con lo declarado en un comunicado por la empresa encargada de proveer la seguridad en el hospital.
Según testigos, el hombre estuvo “un rato ahí” en Urgencias y parecía esperar a que la enfermera Josefina A. se desocupara, para luego entrar cuando esta ya no atendía a los derechohabientes.
La delegada detalló que el agresor le pidió a la enfermera que lo inyectara, y cuando esta le dio la espalda para preparar la inyección, el hombre la sujetó de las manos y la tiró al piso, para luego introducirle gasas en la boca para que no gritara.
Después, el sujeto la tomó de los brazos y comenzó a golpearle la mano izquierda con una especie de piedra, aunque dijo desconocer si se trataba de un mortero o de una roca que el agresor introdujo.
Según la delegada sindical, mientras el hombre atacaba a la enfermera, le dijo que el motivo de la agresión era vengar la muerte de su hija, a quien presuntamente le aplicaron una inyección un día antes en ese hospital que causó que falleciera.
“Mientras estaba machaque y machaque, le dijo a la compañera que era para que inyectara mejor y no como le habían hecho a su hija, más no dijo el nombre ni a qué horas ni nada”, explicó.
Sin embargo, indicó que esto no pudo ser así, ya que de acuerdo con el hombre, a su hija la inyectaron el viernes, y la enfermera agredida sólo trabaja fines de semana y días festivos.
Guadalupe Palacios indicó que la mujer se defendió con unas tijeras que llevaba en su uniforme, las cuales le clavó en la espalda a su agresor “y por eso la soltó”, versión que coincide con lo declarado el pasado sábado por el secretario general del sindicato del ISSSTE, Rogelio Rivera Mora.
Informó que Josefina A., ya presentó su denuncia ante la Procuraduría General de la República e informó que su compañera, que tenía 31 años de servicio, ya no podrá seguir trabajando por lo que pidió a la delegación del ISSSTE que sea pensionada e indemnizada.
“Ya se inició la reconstrucción de su mano pero todavía no saben si recuperará movilidad en sus dedos por ello no creo que pueda seguir trabajando”, dijo.
Por otra parte dijo que hay temor entre el personal y los pacientes de que suceda algo parecido, por lo que ya se pidió que se instale un sistema de circuito cerrado de cámaras de seguridad y que se aumente el resguardo policiaco.