Propuestas y soluciones/Jorge Laurel González

Comparativo en México. Impeachment in USA.

La perspectiva permite el juicio, la comparación, la reflexión. La náusea.

Jean Paul Sartre (1905 – 1980), filósofo y escritor francés.

A un año en el ejercicio de gobierno, los números no son halagadores para el gobierno federal. La tasa de crecimiento del 0 %, producto en gran medida de la falta de inversión tanto pública (por el subejercicio) como por la falta de confianza de los inversores privados, tanto nacionales como extranjeros. La resolución cuestionable sobre el aeropuerto de Texcoco, tuvo consecuencias finalmente. El “ahorro” que, de acuerdo a las nuevas disposiciones, produce un incremento de la partida secreta o discrecional ha costado. Para el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, el gobierno federal deja mucho que desear. Su juicio es duro.

Básicamente Cárdenas nos habla de la posibilidad de que este sea un nuevo “sexenio perdido”. Señala que no hay una propuesta de rumbo para el país, ni ideológica (se niega a calificarlo como un gobierno de izquierda) ni pragmática, al no existir una propuesta integral para resolver el problema del crecimiento económico, la inseguridad, la salud y la educación en nuestro México.

La peor tasa de crecimiento en décadas. Se le compare con el sexenio con el que se le compare, el de Andrés Manuel López Obrador en ese rubro sale hoy perdiendo.

En el tema de inseguridad también, nunca como hoy el crimen organizado se había visto tan empoderado. Las cifras de homicidios dolosos han crecido de una forma alarmante. Cierto que si valoramos la tasa de homicidios por 100,000 habitantes ya no se disparan tanto las cifras, dado que somos más mexicanos. Pese a eso, la tasa es la más alta de los últimos seis sexenios. Desde Miguel de la Madrid a la fecha. En números totales, ni se diga.

En lo único que se levanta victorioso el presidente, es en la propuesta del combate frontal a la corrupción, la percepción es que está haciendo lo correcto. No importa que las compras se hayan centralizado y que muchas se hayan realizado mediante asignación directa. Se ha buscado quitar intermediarios, y sobre todo el evitar que proveedores de los viejos sexenios salgan beneficiados, de ahí la repulsa de todos ellos.

Otro tema positivo y no menor, es la reducción de la pobreza alimentaria, en términos porcentuales (2 %) e incluso en términos absolutos. Esto se ha podido resolver gracias al reparto de recursos en los sistemas distributivos de riqueza (dinero entregado de forma directa) del cual se recupera de entrada un buen porcentaje de IVA, ya que todo el recurso entregado va mayoritariamente al consumo.

La universalidad de la entrega, es también cuestionable, hay quien realmente no lo necesita, pero lo cobra. No importa si la señora maneja un Mercedes Benz, mientras tenga 68 años, tiene derecho a su tarjeta del Bienestar, cobrar sus 2 500 al mes y gastarlos en una comida con su pareja si así lo desea. Finalmente, la bondad del programa se impone. ¿Cuánto tiempo podrá soportarse y a qué costo? No lo sabemos, sobre todo si no hay crecimiento económico.

Por otra parte, en el vecino país al norte, los demócratas se impusieron en la cámara baja y decidieron utilizar su mayoría e iniciar un “impeachment” (juicio político) contra Donald Trump, que será resuelto en el Senado. En el Senado, Donald Trump cuenta con mayoría republicana, su culpabilidad es obvia, es claro que pidió apoyo a Rusia durante la campaña contra Hillary Clinton, para hacer público el tema de los correos electrónicos de la candidata demócrata. Ahora quiso repetir la misma dosis para Joe Biden, pidiendo ayuda a Ucrania y llegó al cinismo de condicionar ayuda económica a ese país, a cambio de ayuda electoral.

El embajador de los Estados Unidos en la Unión Europea, Gordon Sondland, modificó su testimonio anterior a puerta cerrada con los investigadores de la acusación de la Cámara de Representantes para decir que le dijo a un importante asistente político ucraniano que la liberación de la ayuda de seguridad de los Estados Unidos estaba condicionada a que Ucrania anunciara públicamente una investigación que ayudaría al presidente Donald Trump políticamente.

El abogado de Sondland envió al comité una carta y una adición de tres páginas a su testimonio, en la que decía que había recordado una conversación el 1 de septiembre con Andriy Yermak, un asistente del presidente ucraniano, vinculando la ayuda a las investigaciones.

Cuatroscientos millones de ayuda militar, condicionados. Si eso no es tráfico de influencias, no sé qué otra cosa podría serlo.

En el Senado, los republicanos pueden detener la debacle. Cuentan con la mayoría para hacerlo, de cualquier manera, el Presidente estará golpeado. Claro que también cabe la posibilidad que los mismos republicanos quieran deshacerse de Donald Trump (quien es visto por muchos como un arribista) y que le den una oportunidad a Mike Pence, para destituyendo al Presidente, dejarlo asumir como Vicepresidente y enfilarlo a la candidatura, sin la carga negativa de ser un delincuente electoral.

Por lo pronto los debates en la cámara alta de los Estados Unidos de América, serán apasionantes para todo aquel inmerso en la Ciencia Política.

El hecho es que la democracia más poderosa del mundo, tiene la opción de cambiar a su jefe de estado y de gobierno, porque cuenta con los procedimientos democráticos para ello. Trump no ha sabido unir a los demócratas, les ha combatido con odio. No es un Ronald Reagan, que logró construir un gobierno más allá de posturas ideológicas, pensando en el bien superior de la Nación, es un gobernante de opereta, de ocurrencias, un tipo que se le ocurre que puede comprar Groenlandia o que quiere poner un muro para evitar que lleguen los migrantes mexicanos en Colorado, cuando no tiene frontera con México, sino con Nuevo México, que tal vez haya que explicarle a Trump, es un estado más de la Unión Americana, así como tuvo que explicársele a Sarah Palin, (compañera de fórmula en la vicepresidencia con John McCain por el Partido Republicano, contra Barack Obama) donde estaba ubicada Alemania en el mapa de Europa y decirle que en la primera y segunda guerra mundial fueron los antagonistas. Como podemos darnos cuenta, la limitación intelectual se da a todo nivel.

Así que el sabor de triunfo del T-MEC para Donald Trump, le duró poco. Ahora tiene en sus labios el sabor amargo del “impeachment”, que podría poner fin a su carrera política.

Demócratas y Republicanos tendrán que analizar cuidadosamente que hacer en el Senado Norteamericano, finalmente solo Juntos Lograrán Generar: Propuestas y Soluciones.

JLG