Marchan estudiantes y maestros del Cetmar en Zihuatanejo

ZIHUATANEJO, Gro., 22 de mayo de 2019.- Estudiantes y maestros del Centro de Estudios Tecnológico del Mar (Cetmar) número 34, marcharon en las calles principales de este municipio para exigir la pavimentación del camino hacia el plantel, electrificación y el pago de los salarios devengados de docentes.

A las 08:30 horas de este miércoles, alrededor de 50 alumnos y 20 profesores partieron desde el bulevar del Aeropuerto para llegar al Ayuntamiento; durante la marcha se incorporaron a la avenida Paseo de Zihuatanejo, donde bloquearon los dos carriles y de manera intermitente permitían el paso de vehículos.

El director del Cetmar, Emigdio Radamés Ramírez Méndez informó que los estudiantes han expresado en todo momento su inconformidad porque el plantel, a pesar de estar equipado desde hace cinco años de su fundación, al no contar con energía eléctrica no pueden hacer uso de computadoras, aires acondicionados y otros aparatos eléctricos.

El director y un pequeño grupo de alumnos ingresaron a la sala de Cabildo en donde dialogaron con el alcalde Jorge Sánchez y el delegado de Gobierno, Juvenal Maciel Oregón.

Tras la reunión, a puerta cerrada, el presidente se comprometió a que en 20 días iniciarán la obra de electrificación para que en el siguiente ciclo escolar ya cuenten con este servicio y se instalará alumbrado público.

Añadió llevarán la gestión de la pavimentación de la calle con el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo.

Respecto al pago de los salarios de 11 profesores, que en algunos casos tienen un año sin cobrar, señaló que es un tema que está fuera de sus manos, “pero no vamos a dejar a los profesores solos, me hacían solicitud de que apoyáramos a una comitiva que va a ir a la Ciudad de México, para hacer los planteamientos (…) además el delegado de Gobierno a través del Secretario de Gobierno van hacer lo propio con la SEP”, indicó.

El director del Cetmar, Ramírez Méndez dijo que de contar con energía eléctrica podrán operar equipos importantes como una bomba con un valor mayor a 300 mil pesos para llenar tanques de oxígeno para los estudiantes de recreaciones acuáticas y equipos de laboratorio.