Satiricosas/Manú Dornbierer

2018: GRANDES ACONTECIMIENTOS

Este es el último sábado de un año muy especial que termina con tres décadas salinistas nefastas para México. Llegó por fin la Cuarta Transformación que cambiará a un país que dejó el PRIAN, al borde de la ruina, entre otros mayúsculos problemas. Sus creadores, Carlos Salinas de Gortari y Diego Fernández de Cevallos, deberían ir a la cárcel, antes de pasar al infierno del otro mundo que tiempo ha les tiene preparadas sendas suites.

Tras asesinar el PRI a su heredero rebelde, Luis Donaldo Colosio (23 de marzo de 1994), al también priista y cuñado presidencial, gobernador de Guerrero, José Francisco Ruiz Massieu (28 de septiembre 1994), tras destrozar por igual al líder petrolero La Quina (por haber votado en su contra con el grueso de Pemex) Salinas se vio obligado por presiones externas a dejar al gringo de Yale, Ernesto Zedillo a cargo de un México malherido.

Este trataría en principio de sanear el ambiente, encerrando en la cárcel al sospechoso hermano presidencial, Raúl Salinas, hoy blanqueado por el Poder Judicial. Pero Zedillo, terminaría, ó, por transferir el poder a la derecha más inmunda, la panista de mala cepa: las parejas Vicente Fox y Marta Sahagún (2000-2006) y luego a Calderón y Margarita Zavala (2006-2012). Le hicieron más daño a México que muchos priistas anteriores a ellos.

Menos mal que fallaron ambas mujeres en su ambición de heredar el puesto de maridos, a cuál peor. Fox-Coca Cola, traicionó a los que lo eligieron por el hartazgo popular del PRI, y dejó a su ignorante y atroz mujer tomar el mando, y el dinero de los mexicanos para sus hijos bribiesca, ni siquiera para los (adoptados) de él. En cuanto a Calderón, robó vilmente la elección a López Obrador en las narices de todos y la impotencia de aquellos a los que asqueó la cínica frase “HAIGA SIDO COMO HAIGA SIDO”.

Para finalizar con los títeres de Salinas y para concretar la venta del país, Salinas plantó a otro ignorante el Peña Nieto y su mujer, proporcionada por Televisa, que no siguió la misma patraña. Sólo se dedicaron a asaltar las arcas del país y a arruinarlo con una sarta de gobernadores a cuál más ladrón. Salinas, que así lo había anunciado, dio cauce y puso punto final después de 24 años, como había anunciado, a la entrega del país, empezando por el petróleo.

Por fin, por el tesón de López Obrador, robado y denostado una y otra vez, se dio la primera auténtica elección de un presidente de México por el pueblo el 1 de julio de 2018, sin posibilidad alguna del consabido fraude electoral.

Fue tan contundente la elección ante los ojos del mundo, que el PRIAN y sus pequeñuelos se apresuraron con falsa caballerosidad a aceptar su derrota y hasta a felicitar a Andrés Manuel López Obrador, por su victoria. Pero no se les despertó un gramo de patriotismo a los contingentes derechistas que consideran que el gobierno de este país se inventó para que “ellos” se enriquecieran.

Y hoy vuelven a su eterno chantaje grotesco, están tan hechos a tal grado a la corrupción, que hoy por dinero y sol por ello, chantajean al nuevo gobierno grotescamente para que no les disminuya sus estrambóticos sueldazos, porque “lo-gi-ca-men-te tendrían que corromperse”, y ni siquiera se dan cuenta que al revelar así su abyecto pensamiento los jueces encueran su más profunda inmoralidad. ¿La honestidad no está en el ADN de los políticos mexicanos de derecha?

¿ACCIDENTE, CUENTO CHINO O ASESINATO?

Lo sucedido en -Puebla, cualquiera que sea la opción- ha venido a empañar el inicio fuerte y exitoso de este nuevo sexenio. El PRIAN saca a relucir como siempre sus garras y no se detiene ante el sacrificio del que estorba, dentro o fuera de su partido, no importa.

El año de 1994 no está tan lejos como para que se olvide como se las gastan Salinas y su Diego: 1.- Colosio 2.-Ruiz Massieu 3.-Clouthier, 4.-La Quina y otros varios. Uno por uno. Hoy se retoma el sistemita, ya no con los populares “trailers asesinos”, pero tirando helicópteros, como los que se le cayeron a Calderón con dos secretarios de Gobernación dentro, Mouriño y Blake. Marko, con K, hoy jefe del PAN, al servicio del candidato perdedor “canaya” cuya “family” vivía o vive en Estados Unidos, no recuerda, porque era chiquito.

Intentaron culpar a López Obrador de la muerte de la pareja poblana, olvidando que dentro del propio partido fue claramente amenazada por el panista Zepeda, lo que tampoco quiere decir que sea culpable. Sin duda la pareja no era santo de la devoción de éste como tampoco de López Obrador. Muchos sabían que en Puebla inició la gran industria del huachicoleo y esto no es palabra menor.

En mi opinión personal, tras años de entender como masca la iguana, el asesinato, si lo hubo, se gestó dentro del PAN mismo. No se andan por las ramas en eso de matar a los que les estorban fuera, pero también dentro como se ve en muchos ejemplos. Cada quien tiene el derecho de elucubrar, pero no de acusar groseramente como es el caso, por seguir atacando a Andrés Manuel como en su campaña.

Hasta la Dresser, egresada de Brookings Institution, un “think tank” apoyador de los Bush, que “fabrica espías”, se atarantó al grado de acusar lo prácticamente. Muy “macha” llamó “a bullear” -como decía Peña- al nuevo mandatario de México. Por la reacción de esta protegida de Aristegui, es obvio que a la CIA no le gusta el presidente de México. Habría que acusarla con Trump que parece estar bastante de acuerdo con la política del nuevo gobierno especto a la política a seguir para evitar con inteligencia y justicia la migración de Centroamérica.

Y ya que hablamos de malas pécoras, recordemos que fue Hillary Clinton la que armó, como secretaria de Estado de Obama, el desastre de Honduras. El presidente Zelaya estaba realmente ayudando a su país, pero tenía un defecto, era de izquierda y amigo de Chávez. La Clinton, literalmente destruyó a ese pequeño país americano como a otros.

Pero en cuanto a la ola de furia por el cambio, no hay que hacer caso, no “pele” ni califique. Simplemente demandé por calumnia, si se pasa de la raya la gentecilla fúrica. Ignoré a los viles políticos tipo Javier Lozano que sin embargo quiere ocupar el puesto libre. Lucran para su propio beneficio con tragedias como igual que periodistas como la citada. Un consejo, presidente, no conteste a esa clase de enemigos. Los enaltece.

Digamos adiós al especialísimo año de 2018 y esperemos que el trepidante gobierno de López Obrador no pierda el ritmo ni un minuto. Hay que levantar a México.